miércoles, 15 de julio de 2009

Allah me es suficiente


ALLAH ME ES SUFICIENTE
“En el nombre de Allah, El Clemente, El Misericordioso”

Antonio Al Saladin, musulmán de estas tierras, vivía en lejano poblado a la orilla de un riachuelo.
Aconteció que con las lluvias el riachuelo aumento su caudal y se desbordó, arrasándolo todo a su paso; afortunadamente no hubo víctimas, pero las casuchas, los pocos animales, las cosechas y todo cuanto poseían sus moradores desapareció.
Todos, excepto Al Saladin, lloraban, maldecían y la tristeza y desesperación los invadía. Además de las imprecaciones que lanzaban, se decían unos a otros,
“De nada nos ha servido ser devotos de la virgen y de los santos”
“Ahora que vamos a hacer, todo lo hemos perdido, no tenemos dinero para irnos a otro lugar, ni casa ni bienes”…
Por su parte, Al Saladin y su familia, se apartaron del grupo, buscaron agua limpia, hicieron su limpieza ritual y en un pequeño lugar seco, cumplieron con el salat- Oración- , alabando a Allah, el Dios único, Creador del Universo y de todo cuanto existe. También suplicaron por su situación y la de sus vecinos:
“¡Oh, Allah! Hacia Tí elevamos nuestras súplicas, te rogamos humildemente que soluciones nuestros problemas. Y nos damos cuenta que al invocar tu Santo Nombre, los corazones se sosiegan, la mente se tranquiliza, la certeza y coraje se afirma producto de la fe y esperanza en Ti. “
Al Saladin recordó, también, la palabra de Allah en El Sagrado Corán:
“No sucede ninguna desgracia en la Tierra ni os azota a vosotros mismos adversidad alguna sin que esté registrada en un libro [la Tabla Protegida] antes de que acontezca”.
“Diles: No nos acontecerá salvo lo que Allah haya decretado para nosotros”.
Sus vecinos quedaron desconcertados, como podía ese hombre y su familia, estar tranquilo y, además, alabar a su Dios, como si nada hubiera sucedido y se preguntaban:
¿Por qué no culpa a su Dios de la desgracia que nos golpea? ¿Por qué no se queja ante su Dios? Lo que hace es alabarlo y suplicarle…
Y dijeron:
“Mira como estamos, arruinados y sin un techo ni nada que comer, ni con que trabajar, Dios y los Santos nos han abandonado…”
Al Saladin, les respondió:
“Allah es Fuente de la Sutileza, Socorro, Beneficio. “Toda gracia que os alcance proviene de Allah”.

Y “No nos acontecerá salvo lo que Allah haya decretado para nosotros”.


Y les dijo, “Yo me iré a otro lugar a comenzar de nuevo y sí Allah lo permite, la fortuna me será grata”

Sus vecinos le gritaron:

“Además de iluso, creyendo que Dios te va solucionar tus problemas, eres insensato, no ves que si te vas, pierdes las ayudas del gobierno y de las gentes caritativas… Esa es nuestra única solución y la salvación, sin esas ayudas estamos perdidos.

A lo que Al Saladin, les recitó:

“No iré jamás en busca de la ayuda y de la asistencia de las criaturas. Me apoyaré en Dios- Allah- y recurriré a la energía y a las capacidades que han sido depositadas en mi ser. Le pido a Él que me conceda el éxito en aquello que emprenda y me preserve de la necesidad.”
Y “Ayudamos a quienquiera que nos pida ayuda, pero Allah –Dios- eliminará la necesidad de quien disimule la dificultad y se abstenga de tender la mano ante una criatura".”
Y cogidos de la mano, El y su familia, emprendieron camino a otras tierras y repetían una y otra vez:
“Me es suficiente con Allah y Él es el mejor protector”
“Me es suficiente con Allah y Él es el mejor protector”
“Me es suficiente con Allah y Él es el mejor protector”